lunes, 15 de febrero de 2016

El retorno de los male models

Hay dos maneras de evaluar una película de culto: o bien se le aplican los mismos criterios que a cualquier otro tipo de cine (y, por lo tanto, muy probablemente se la destroce) o se la juzga a partir de su propia estructura de sentido, con expectativas absolutamente realistas respecto de la misma. Al momento de sentarme a ver Zoolander 2 (a la cual considero de culto por su impacto en la cultura pop, aún cuando haya salido de las entrañas hollywoodenses), opté por este segundo criterio y, quizás gracias a eso, encontré más de lo que esperaba.



















Lo habitual es que la secuela de una película llegue entre 1 y 3 años después de su predecesora. En este caso, nos encontramos con un salto temporal de 15 años que, a mi entender, se supo capitalizar. Algunas críticas afirmaron que el film envejeció mal, pero no coincido: Zoolander envejeció lo mejor posible, en sus propios términos, y manteniendo un humor absurdo que logra el objetivo primordial, es decir, hacerte reír. Porque al margen de toda consideración, te garantizo que si vas a ver la película te vas a reír, sin ninguna duda.



Lo mejor de Zoolander 2:



1) La química está intacta




Derez Zoolander y Hansel McDonald. Ben Stiller y Owen Wilson. El combinado de dulce de leche y crema. La pareja mantiene la frescura del primer film y logra retratar a la perfección el vínculo entre estos dos male models que son, esencialmente...idiotas. Todo desemboca en un final épico (por lo ridículo ,claro está) en el que ambos unirán fuerzas en un combo de padres e hijos muy especial (just wait and see!)

 

2) Las referencias al primer film







Está claro que Zoolander 2 es más un homenaje a la primer película que una secuela per sé, y esto queda bien claro cuando los mejores momentos de esta son rememorados en el contexto de la historia actual. A muchos espectadores, este recurso les resultó excesivo. Yo creo que fue en muchos aspectos necesario, no solo en clave de homenaje, sino para sacudir un poco la memoria (15 años gente, that's A LOT) y generar una complicidad con el público. Los estas volviendo a ver, siguen igual de imbéciles y te recuerdan por qué los elegiste en primer lugar.

 

3) "ALL" (y cómo todos se prendieron a la joda)


Bennedict Cumberbatch, nominado al Oscar por El código enigma, el Sherlock de nuestra generación, un actor de pura cepa...convertido en uu festival de androginia.

 

Los 5 minutos de Cumberbatch en escena son magníficos y no, no hace casi nada, pero verlo ahí, SIN CEJAS, con esos gestos, con su mirada penetrante e incómoda lo es..."TODO".

Está claro que toda celebridad a la cual le propusieron sumarse a esta segunda entrega dijo que sí. Esto demuestra que Zoolander fue, a su propio y bizarro modo, un hito de la cultura popular. Desfilan uno atrás de otro (incluso en cameos bastante...surrealistas) Billy Zane, Justin Bieber, Katy Perry, Tommy Hilfiger, Arianna Grande y...y...NO SE LOS PIENSO DECIR. Solo les cuento que los va a hacer muy felices.

 



Me resulta difícil criticar algo de Zoolander 2 porque, honestamente, es solo entendible desde su propia lógica. Si nos calzamos los monóculos, seguramente encontraríamos incontables fallas de toda índole. Pero en su mundo, en sus términos, con sus propios códigos, Zoolander 2 es justamente lo que se esperaba de ella: una secuela nostálgica, afortunadamente aggiornada a los tiempos que corren (y burlándose de ese salto temporal) y, fundamentalmente, una película que se ríe de sí misma constantemente. Este, sin lugar a dudas, es su mayor acierto y lo que permite celebrar este regreso (y no lamentar que no hayan dejado intacta la obra original).

Ahora POR FAVOR, dejenlo ahí muchachos. Nada de Zoolander 3 con Derek Junior de protagonista, nada de Hansel siendo abuelo, ningún invento arruina hitos. Las secuelas no siempre salen bien, enjoy the moment y cierren el ciclo, porque no saber cerrar una historia, extenderla más allá de sus posibilidades, es el Zika de la ficción (tenemos años de televisión argentina que lo comprueban)

 
... Ah, ¿se pensaron que me había olvidado?



 Nah. Es simplemente que huelga aclarar que Will Ferrell es MAGIA BIZARRA por doquier.








No hay comentarios:

Publicar un comentario